Compras electrónicas
Lexdir
La protección a los consumidores se extiende a las compras que se realizan vía comercio electrónico. En esta guía se detallaran las obligaciones del vendedor y las garantías que puede ejercer el consumidor electrónico.
De acuerdo a lo señalado por el Servicio Nacional del Consumidor los proveedores en línea deben proporcionar una descripción real y veraz de las características de sus productos, la publicidad de los productos o servicios no debe ser engañosa o inducir al error, los proveedores en línea deben promocionar sus productos y servicios en idioma español. Ellos pueden tener opciones de traducción del sitio a otros idiomas, pero deben cumplir con la exigencia del idioma español en primer lugar.
Los proveedores en línea deben indicar claramente cuál es el precio total del producto; éste deberá expresarse en moneda nacional e incluir todos los impuestos. Antes de realizar la transacción comercial el comprador debe verificar los términos de la compra, tales como: garantías, cargos extras, formas de pago y envío, restricciones geográficas, y las condiciones de cancelación, reembolso o devolución.
Respecto a la protección de datos, es muy importante que los proveedores en línea utilicen sistemas de seguridad para proteger los datos personales y financieros, los cuales no pueden compartir con otros proveedores sin la autorización del, consumidor.
Si el producto no cumple con lo esperado, los consumidores se pueden arrepentir de la compra dentro de los 10 días desde que recibió el producto o contrató el servicio.
La empresa debe enviar una confirmación escrita del contrato celebrado. De no ser así, el plazo de retracto se extiende a 90 días.
Si se compra un producto nuevo por Internet que sale malo, se tiene el mismo derecho a garantía legal; esto es: dentro de los tres primeros meses se puede elegir entre el cambio, la reparación o la devolución de lo pagado. Ciertos productos, como algunos artículos eléctricos, electrodomésticos o automóviles, exigen condiciones extras para hacer valer la garantía legal y/o voluntaria, como cumplir con una revisión técnica para determinar la falla. Si el producto falla nuevamente, los consumidores pueden exigir que se apliquen las mismas condiciones de la garantía legal: exigir el cambio, la reparación o la devolución de lo pagado.